Hay una sola cosa segura en la campaña porteña: los candidatos van a tener que debatir. Por ley, desde hace siete años, existen debates obligatorios en la Ciudad de Buenos Aires. Ocurrieron ya en tres instancias electorales. Pero esta va a tener dos particularidades: la primera es que va a ser una elección que tendrá una atención que no tuvo ninguna otra y donde está nacionalizada la discusión. La segunda es que, al no existir las PAS17 candidatos