El póquer de los mentirosos
Imagine entregar los ahorros de su abuela a un jugador compulsivo. O poner al mando del colectivo escolar a un acróbata del rally. Eso hizo la Argentina al dejar su economía en manos de ex traders de Wall Street.
Imagine entregar los ahorros de su abuela a un jugador compulsivo. O poner al mando del colectivo escolar a un acróbata del rally. Eso hizo la Argentina al dejar su economía en manos de ex traders de Wall Street.